La playa de La Caleta es la única playa situada en el casco histórico de la ciudad, por lo que presenta características de playa urbana. Se sitúa entre el castillo de Santa Catalina y el Malecón que une la isla del Castillo de San Sebastián con la ciudad. Tiene una longitud de 500 metros y una anchura media en bajamar de 50 metros, con paseo marítimo peatonal y tráfico rodado.
Existen 2 accesos adaptados a la playa, uno mediante rampa adaptada bien dimensionada, protegida y con pasamanos a ambos lados del recorrido, y otra a través del espigón de acceso al castillo de San Sebastián desde La Caleta, rampa muy ancha pero de pequeñas dimensiones, sin pasamanos ni barandilla de proteccion. Existe también escalera de acceso en varios puntos de la playa, alguna con contrahuella excesiva.
Playa galardonada con Bandera Azul 2016.
En el momento de la visita todos los elementos de accesibilidad de la playa no se encuentran instalados o en funcionamiento por la finalización de la temporada de baño.
Se ha recabado información de fuentes secundarias sobre las condiciones habituales de accesibilidad de la playa, que se relacionan a continuación.
Servicios: aparcamiento, pasarelas de acceso hasta la zona húmeda de la playa, duchas, personal de apoyo para el baño, rampas, sillas anfibias, WC, zona de sombra.
Buen acceso desde los medios de transporte, con varias paradas del autobus urbano en toda su longitud y parada de taxi. El municipio cuenta con dotación de taxi adaptado. Bolsas de aparcamiento a lo largo de todo el litoral con aparcamientos adaptados.
Buena movilidad a lo largo del paseo, con itinerarios de anchura adecuada y con pavimentos no deslizantes y en buen estado. No existen en el paseo obstáculos que obliguen a un tránsito incómodo a lo largo del mismo. Pasos y vados peatonales bien diseñados, enrasados con la calzada y señalizados de forma adecuada.
El acceso al recurso se realiza mediante escaleras y mediante una rampa de de dos tramos que comunica el paseo con la zona donde se ubican habitualmente los servicios adaptados de la playa. Esta rampa es adecuada, aunque sus tramos son excesivamente largos. El acceso no está señalizado con el SIA. Los pavimentos son no deslizantes y están en buen estado.
La rampa de acceso comunica directamente con un espacio de recepción, donde se encuentran los módulos de aseo en la temporada de baño.
En el momento de la visita, las pasarelas de tablones de madera se encuentran sin desplegar por haber finalizado la temporada de baño.
No procede valoración.
Existe aseo adaptado de uso público. En el momento de la visita, los aseos adaptados se encuentran cerrados por haber finalizado la temporada de baño.
No procede valoración.
No procede valoración.
Existe señalización estancial con indicación de los elementos accesibles existentes.
El recurso no dispone de acreditaciones en accesibilidad. Existe, en la entrada al recurso, cartel general de información que ofrece información sobre los equipamientos adaptados, las actividades permitidas y los teléfonos de emergencia. El personal dispone de formación específica en atención a personas con discapacidad.
No procede valoración.
No procede valoración.
No procede valoración.
No procede valoración.
En el momento de la visita, los elementos de accesibilidad de la playa no se encuentran instalados o en funcionamiento por finalización de temporada de baño. Se ha recabado información de fuentes secundarias sobre las condiciones habituales de accesibilidad de la playa, que se relacionan a continuación. Servicios: aparcamiento, pasarelas de acceso hasta la zona húmeda de la playa, duchas, personal de apoyo para el baño, rampas, sillas anfibias, WC, zona de sombra.